Segunda época de Evo

En los tiempos de amautas del antiguo imperio inca, cada líder tuvo su era e hizo historia que hoy sigue asombrando con hechos y monumentos que para los incrédulos sólo lo pudieron hacer los “extraterrestres”, negando de esa manera el aporte indígena en la historia de la humanidad.

Como en aquellos tiempos, Bolivia tiene en la actualidad su líder y, es indiscutible el renacer indígena después de padecer los golpes de estados militares y ser gobernados por sátrapas que humillaron y condenaron a la mayoría de la población boliviana a la miseria y pobreza, mientras los recursos naturales lo vendían a mejor postor en el mundo industrializado para quedar en manos extranjeras.

Es por ello que no podemos pasar por alto el segundo mandato presidencial de Evo Morales, que contra todo pronóstico ganó todas las batallas legales y políticas para gritarle al mundo el “fin del Estado colonial para dar la bienvenida a un Estado Plurinacional”, sueño de todos los verdaderos creyentes de la democracia y claro está de los pueblos indígenas de Abya Yala que han sido tratados siempre de ciudadanos de segunda clase o simplemente invisibles en su propias “patrias”.

Nadie puede negar que estamos en un mundo de cambios, actualmente en vez de “guerra de civilizaciones” hay nuevo despertar de las culturas oprimidas, que va ganando batallas sin armas letales o de exterminio masivo, con las mismas armas políticas del opresor o utilizando las mismas herramientas del “enemigo”, jugar en la misma cancha de quienes lo detestan, pero que tarde o temprano reconocerán que también saben perder.

Independientemente, porqué fuerzas políticas esté respaldado Evo, el movimiento indígena, que se viene consolidando desde los finales del siglo pasado y que ha estado a puertas del poder político en algunos países, va tomando más terreno y está haciendo cambiar leyes y constituciones que a la larga ha de significar el rescate de la identidad y defensa de sus territorios que es trofeo de guerra y no dejarse de quitar.

No nos queda más que saludar al hermano Evo y su gobierno y desearle éxitos, al igual que a los 36 pueblos indígenas que han hecho posible enseñar otro rostro a la política criolla latinoamericana, por lo que enarbolando la Wiphala, entre quenas y zampoñas celebrando el triunfo, van “caminando hacia el futuro, mirando las huellas del pasado”.

(Foto tomado del periodico boliviano Jornada net.com)