A unas horas de ir Palmas, Brasil, a los Primeros Juegos
Mundiales Indígenas (JMPI), me embarga una honda alegría y dolor a la vez,
después de haber culminado una fase en la celebración de esos juegos. Cuando el
equipo del Comité Intertribal del Brasil con Marcos y Carlos Terena al frente,
a mediados del año 2013, me invita a integrar en esa empresa, y después de
anunciarlo al mundo en noviembre de ese año en Cuiabá, Mato Groso, todo era
distante y casi un sueño.
Luego a finales de 2013, con la Profesora Iguandili López,
empezamos a invitar distintas ligas indígenas en Panamá para conformar lo que
es el Comité Indígenas de Panamá (CIP), jóvenes atletas de diferentes ramas se
empeñaron no sólo practicar los deportes señalados en el Reglamento de los
JMPI, sino también practicaron y abrazaron la cultura, danzaron y se esforzaron
para ir mañana como embajadores de sus culturas además de atletas.
Agradezco a todos los que confiaron en el CIP, en especial a
Pandeportes, a Roberto Arango, su Director y Equipo, que nos ha dado el apoyo
completo, a otros distintos ministerios que nos han dado la mano, a la
Universidad de Panamá, SENAFRONT, Cable Onda Sport, Congresos Generales Gunas,
Taller Guiled, Municipio de Panamá, Diputado Absalón Herrera, a la marca
deportiva PUMA y muchos otras personas, amigos y empresas que ahora no me viene
en mente, Nuedi, Gracias.
Al equipo del CIP, a los coordinadores Pablo Green y
Milciades Brenes, a los delegados de la Liga de Futbol de Guna de Gunayala,
Colón y Panamá. Al maestro Diguar, Marden Paniza (invitado especial del JMPI),
en especial a los atletas Ngâbes, Buglé, Wounan, Emberas y Gunas, que con sudor
han ganado estar en esa fiesta mundial que se inaugura en Palmas, Estado de
Tocantins, el viernes 23 de octubre, Bienvenidos a Palmas.
A mis camaradas de las largas tertulias en Calle 20,
“Diana´s Bar”, Kawigdi, llevaremos sus aplausos con los hermanos indígenas del
mundo.
Sioggo a nuggi, deguimalo.
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